Beneficios de implementar el ajo en tu dieta
El ajo es ese vegetal que todo el mundo relaciona con el fuerte sabor que contiene y ese desagradable olor que puede dejar en tu aliento. Pero, en su mayoría, nadie se ha parado a pensar cuáles son los beneficios de implementar el ajo en tu dieta.
En la ficción siempre nos ha enseñado esa versión «negativa» sobre este alimento, esa obsesión cinematográfica vampírica que parece no tener fin y que refiere todo el tiempo cómo estos personajes literarios rechazan el ajo. Algo que, para nada, debemos aprender de la cultura del cine.
Ingerir este vegetal con continuidad te va a ayudar a mejorar tu sistema inmunológico gracias a su gran cantidad de propiedades que favorecen a tu salud.
¿Quieres conocer cuáles son? Quédate con nosotros.
Propiedades favorables del ajo
El ajo es un potente anticoagulante, ya que ayuda a diluir tu sangre, haciendo que puedas prevenir fuertes patologías como la trombosis. Además, tiene efectos antibacterianos, antifúngicos y antivirales, blindando a tu cuerpo de cualquier agente exterior que pueda atacar a tu salud. Esto significa que ya le puedes decir adiós a los resfriados y hola a un sistema inmunológico de hierro.
Cabe destacar que es un alimento antioxidante, es decir, consumir ajo todos los días es asegurarte un mayor bienestar y una mejora en el organismo.
A decir, podrías hablar sobre los beneficios de este alimento durante horas. Si el médico te ha alertado de un colesterol alto, el ajo se ha convertido en tu mejor aliado. De hecho, preparar un diente de ajo con medio limón es la receta perfecta para tomar junto al desayuno cada mañana. Eso sí, lo correcto es machacarlo o cortarlo en finas láminas y, si se quiere suavizar un poco el sabor, ¡aceite de oliva!
Si esta solución no te llama en absoluto la atención, en Herci tenemos otra alternativa, ¡unas recetas con la que te chuparás los dedos!
Recetas basadas en el ajo
Existen una infinidad de fórmulas para implementar este vegetal en tu dieta, por eso te queremos traer las 5 más sabrosas y sencillas de hacer.
- Sopa de ajo. Con tan solo unos pocos huevos, unos tacos de jamón, aceite, pimentón y varios ajos, puedes realizar una deliciosa sopa de lo más saludable, que te ayudará a mantenerte sano y combatir el intenso frío del invierno.
- Pollo asado. Si pruebas a añadir ajo a tu receta tradicional de realizar el pollo, no solo le aportarás un toque de sabor mucho más intenso, sino que quedará un almuerzo o cena super nutritivo a la par de sabroso.
- Gambas al ajillo. Para los amantes del marisco, el ajo también puede ser un gran condimento para sus platos. Esta comida es muy sencilla de realizar, solo necesitarás para su elaboración: gambas, unos pocos ajos, vino blanco y guindillas al gusto.
- Pan de ajo. Receta rápida y sencilla para los amantes de la comida italiana. Con tan solo unos panecillos, unos buenos ajos, y un poco de queso, podrás obtener una cena de lo más apetitosa
- Salsa de ajo y perfil. Perfecta para sazonar tus pescados o cualquier otro alimento. Solo necesitas ajo y perfil fresco para su elaboración, y es una opción mucho más saludable que otros condimentos.
En definitiva, el ajo no es solo un alimento muy beneficioso para tu salud, sino que también se puede convertir en el ingrediente estrella de muchos de tus platos favoritos, aportando un excelente equilibrio de sabor y sanidad a todos tus platos.